Un nuevo escándalo sacude a la provincia de Chaco: el gobernador Leandro Zdero ha destinado más de 30 millones de pesos de fondos públicos a un evento promocional con la modelo Carolina "Pampita" Ardohaín, en medio de una crisis económica que golpea duramente a los chaqueños.
El evento, realizado el 23 de abril de 2025 para celebrar la llegada de la aerolínea JetSmart, incluyó pagos millonarios a celebridades, cenas de lujo y servicios exorbitantes, mientras el 76,2 por ciento de la población de Resistencia vive en la pobreza, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INdEC).
Lo que se presentó como una estrategia para impulsar el turismo se transformó en una exhibición de derroche que ha indignado a la ciudadanía. Documentos oficiales revelan que el Gobierno provincial gastó sumas astronómicas, como 20 mil dólares (más de 23 millones de pesos) para contratar a Pampita, 2.650.000 en catering (incluyendo una cena de 2.250.000 para 6 personas) y 1.200.000 para el cantante Piko Frank, entre otros costos.
La resolución 221 del 23 de abril de 2025 confirma estos gastos, detallando contratos con empresas como Gráfica BML SAS para la participación de figuras públicas.
Los números del escándalo:
Estos montos, que superan los 30 millones de pesos, contrastan brutalmente con la realidad de una provincia donde miles de familias carecen de acceso a agua potable, empleo o alimentos básicos. La indignación se ha hecho sentir en redes sociales, con comentarios como: "Zdero gasta 30 millones de pesos en 'Pampita' y cenas de lujo mientras los chaqueños no tienen para comer. ¡Una vergüenza!".
Críticas y contexto
La oposición y organizaciones sociales han alzado la voz contra lo que consideran una burla a las necesidades del pueblo. "Es inadmisible que Zdero priorice un show con famosos sobre la gente que no llega a fin de mes", afirmó un legislador local.
El malestar crece al recordar que Chaco recibió recientemente 120 mil millones de pesos en coparticipación tras un acuerdo con La Libertad Avanza (LLA), fondos que muchos esperaban ver invertidos en mejoras sociales y no en eventos ostentosos.
En un momento de alta inflación y desempleo, la decisión de Zdero de gastar millones en marketing personal ha sido interpretada como una señal de desconexión con la realidad. "Esto no es gobernar, es hacer campaña con el hambre del pueblo", denunció un activista chaqueño.