Poner al zorro a cuidar el gallinero tiene sus consecuencias y estas quedaron expuestas el último fin de semana cuando asesinaron, a la salida del partido de Rosario Central, al líder de la barra canalla Andrés "Pillín" Bracamonte y su ladero Daniel Raúl "Rana" Attardo.
Mientras la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, se rasgan las vestiduras por haber "encausado" la inseguridad en Rosario, detrás de la escena se venía cocinando una negociación que tiene olor a negociado y narcotráfico.
Para entender la secuencia hay que sacar la vista de Rosario Central y mirar hacia el otro. "Los Monos", la reconocida banda de narco, ya controla la venta de drogas en la barra de Newell's Old Boys y deseaban hacerse del negocio también en el Gigante de Arroyito, pero alguien se los impedía: "Pillín" Bracamonte.
La cuenta es sencilla: una guerra por el territorio, un gobernador que fue ministro de Seguridad y una zona sin luz y sin presencia policial. Todos los condimentos están arriba de la mesa, es cuestión de unir cabos.
La prensa dialogó con diferentes personas de Rosario, desde vecinos comunes hasta personas vinculadas a la política en el futbol y abogados y todas coinciden en lo mismo, a "Pillín" lo entregaron. Por ahora no parece que ni Bullrich, mucho menos Pullaro, estén queriendo solucionar la cuestión.
Pullaro y el narcotráfico: un vínculo con años de historia
No hay que irse muy atrás en el tiempo para recordar cuando su competidora interna en los últimos comicios, Carolina Lozada, lo acusaba de tener relación con el sector narco, y no es la única ni la primera en denunciarlo.
Pullaro, hace muchos años, designó Alejandro Druetta como líder de la división narcotráfico sur de la provincia de Santa Fe, un Druetta que había sido denunciado en 2012 por tener vínculos con las mismas personas que debía combatir.
¿Cómo terminó la cuestión? Druetta condenado, en 2021, por proteger bandas narco. Algo que dejó aún más en evidencia el vínculo que Pullaro son las escuchas que se filtraron con Druetta donde le ofrecía apoyo y abogados de manera gratuita.
Otro dato es que durante la primera parte del juicio que se le realizó a la banda "Los Monos", el ex comisario Gustavo Pereyra, inmerso en el mundo del tráfico de drogas, declaró que Pullaro y Druetta recibieron dinero en efectivo de parte de una banda narco de Córdoba para trasladar la mercadería desde Santa Fe a Buenos Aires.
Pullaro fue vinculado al mundo narco en más de una oportunidad. Es más, fue el mismo Pullaro el que designó a la conducción de la policía de San Lorenzo, la cual terminó comprometida en la protección del narcotraficante Esteban Lindor Alvarado (narco que contrató policías, que fueron ascendidos por Pullaro y luego terminaron presos, para "sacar del medio" a "Los Monos").