11 de noviembre de 2022
Judicial

Exclusivo

Horacio Omar Mazza, el "empresaurio" vaciador serial de empresas

La comparación del edificio en el barrio porteño Saavedra, sobre el ahora y el cómo debería haber quedado ya pasado el año.
La comparación del edificio en el barrio porteño Saavedra, sobre el ahora y el cómo debería haber quedado ya pasado el año.

“Si querés pensar en la definición de lo que es un ‘empresaurio’, el mejor ejemplo son los cazadores de zoológico. Porque se hacen socios de los Gobiernos para robar y tomar su tajada de la enorme caja política sustentada por los impuestos”, sentenció en más de una ocasión el diputado nacional Javier Milei.

Ese poncho le queda muy bien puesto al controversial empresario Horacio Omar Mazza, el cual corre a sus espaldas con el polémico caso de su empresa CM Emprendimientos (la cual tiene en sociedad con Néstor Ariel Curland) que dejó a unas 55 mil familias en el barrio porteño de Saavedra con un tenso reclamo judicial.

Los propietarios, muchos de los cuales invirtieron los ahorros de toda una vida, sienten impotencia y bronca. La obra está frenada desde 2018 por un litigio del que ninguno de ellos es responsable.

Vale recalcar que la constructora comenzó la obra y las “ventas en pozo” después de adquirir el terreno a la Sociedad Anónima Editora La Vanguardia, que en ese momento se presentaba como la propietaria.

Ya con el 70 por ciento de avance del proyecto, un tibio reclamo ante la Justicia para la titularidad del lote dejó todo a la deriva. Allí comenzó el derrotero para los propietarios que pagaron hasta 350 mil dólares con la promesa de que en menos de un año se mudarían al techo propio.

Los damnificados aseguran que la desarrolladora cobró la totalidad de los fondos y la construcción nunca terminó. Pese a que existe una medida cautelar que prohíbe disponer del terreno, la empresa constructora les exige nuevos pagos a los compradores para avanzar con las terminaciones del edificio.

La misma historia de siempre

Mazza no cuenta contaría con una autocrítica propia, ya que también tendría una sociedad en una empresa de cocheras que se ubican en avenida Rivadavia al 2142 (Ciudad Autónoma de Buenos Aires).

En la misma, se habría encargado de vaciar las arcas de las cocheras para presentar bancarrota. Sin embargo, se encargó de cumplirle los caprichos a su esposa María Nuria Costa, comprando presuntamente cabañas y hasta llevándola a pasear por el exterior.

Según pudo averiguar Causa Judicial, la otra parte de la sociedad serían personas de mucho peso, con las cuales no le ha convenido meterse. Ya que, desde lo judicial, llegaría muy a contramano. ¿Tendrá su merecido el “empresaurio” Mazza?

Comentarios