Un periodista alertó sobre la situación: los compañeros de Hernán Alberto Coll debieron “hacer una vaquita” para pagar el servicio, aunque finalmente se resolvió sin ese dinero.

Una breve demora en el servicio de sepelio por una cuota impaga a la Cooperativa Eléctrica de Luján generó un malestar momentáneo entre los vecinos y los compañeros de Hernán Alberto Coll, el policía asesinado este martes en Torres, durante un allanamiento.

La situación fue dada a conocer por Osvaldo Cabral. El periodista local aseguró que los compañeros de Coll debieron organizarse para juntar dinero para el funeral, debido a la negativa de la entidad de realizarlo por la cuota impaga de la luz.

“La Cooperativa Eléctrica que presta el servicio funerario en la ciudad de Luján se negaba a hacer el sepelio. Sus compañeros estaban consternados. El argumento era que el fallecido debía los recibos de la luz. Uno de los jefes policiales de la zona solicitó a los uniformados dinero para poder hacer ‘una vaquita’ para poder hacerlo”, contó Cabral.

“La realidad indica que esta persona lamentablemente fallecida tenía deuda en general: luz, cuota social del servicio Funerarios desde hace varios meses”, reconoció Fabián Simone, gerente del servicio funerario de la Cooperativa.

Sin embargo, aseguró que el incidente fue solucionado de forma inmediata. “El servicio en ningún momento se negó y menos en semejante escenario, hasta la misma Municipalidad intervino como para que no sea un limitarte el tema de la deuda”, agregó.

 “Se resolvió al instante con la autorización de la gerencia y la Municipalidad. Nunca deber recibos de luz, estando vigente la cuenta, fue un impedimento para realizar el servicio fúnebre. Igualmente, se analiza si hay una deuda, pero de muchos recibos”, cerró Simone.