"El día que él tanto deseó, me lo mató la policía". Para la madre de Lucas Verón, su hijo fue "fusilado en el piso" el mismo día en que cumplía 18 años cuando circulaba en moto con un amigo por las calles de un barrio del partido de La Matanza por dos policías que los persiguieron a bordo de un patrullero sin luces ni sin sirenas, en lo que se trató de uno de los casos más resonantes de violencia institucional en el momento más duro de las restricciones por la pandemia del coronavirus.
Lucas solía decirle a su madre que quería ser mayor de edad para salir a trabajar para poder ayudarla.
El 10 de julio del 2020, Lucas estaba festejando su cumpleaños 18 con sus amigos.
— ian werbin 📰 (@ianwerbin) July 9, 2022
En un momento de la noche, fue a comprar gaseosas a un kiosco. En el trayecto, un policía le disparó.
Mi nota para @AgenciaTelam sobre el caso de Lucas Verón 👇https://t.co/ETVF2D8RSM
Justamente, durante la madrugada del 10 de julio de 2020, en la que festejaba su cumpleaños 18, el joven se dirigió a bordo de una moto junto a su amigo Gonzalo rumbo a un kiosco situando en Calderón De La Barca y La Bastilla, en el barrio de Villa Scasso, para comprar unas gaseosas.