En la jerga policial se lo denomina "cortito". Consiste en cruzar a una víctima, subirlo a un auto y exigirle dinero a cambio de no armarle un causa. "Es algo exprés", detalló un ex policía. No a cualquiera se le hace "un cortito". Los damnificados suelen ser narcotraficantes, ladrones o comerciantes ilegales. O en su defecto familiares de delincuentes.
Los investigadores del crimen de Lautaro Morello (18) y del secuestro y desaparición de Lucas Escalante (26) están convencidos: creen que Cristian Centurión, junto a su primo Maximiliano, hasta ahora los únicos dos detenidos que tiene la causa de Florencio Varela, citaron a Escalante con el objetivo de hacer un "cortito".
la extorsión que estaría detrás del crimen y la desaparición de Florencio Varela https://t.co/ihnQgUDPxA
— Diario Digital (@Actualidad_ar) December 18, 2022
Cristian Centurión es cadete de la Policía Bonaerense e hijo del comisario mayor Francisco "Coco" Centurión. Cristian y Lucas, que continúa desaparecido, se conocían porque eran socios en un negocio ilegal: el de las tarjetas para combustible de la Policía Bonaerense.
"Es uno de los mejores negocios de la Policía", cuenta una persona que pasó más de 20 años en la fuerza. "Es que varias empresas en las que se pide colaboración te ofrecen pagarte con combustible. Como una logística o una fábrica que hace un reparto importante", agrega. A partir de esos acuerdos, los móviles llenan sus tanques en las empresas. El segundo paso es el acuerdo con dueños de estaciones de servicio.