El joven que sobrevivió a los balazos tras la persecución policial en la que fue asesinado Lucas Verón, en 2020 en González Catán, aseguró este martes en el inicio del juicio por jurados a dos efectivos que estos oficiales no les dieron la voz de alto, que aceleraron la moto porque los quisieron chocar con el patrullero y se asustaron y que les efectuaron "cuatro disparos".
En tanto, Cristian Verón, padre de Lucas, declaró este martes que cuando fueron al hospital ya sabían "que había sido la Policía" la responsable de balear a su hijo, a quien definió como "un chico sano de la casa, que trabajaba y estudiaba", y que "jamás pisó ni la vereda de una comisaría".
SEGÚN UN AMIGO DE LUCAS LOS POLICÍAS NO DIERON LA VOZ DE ALTO Y LES DISPARARON 4 TIROS
— La Urbe Digital (@laurbedigital) August 17, 2022
Se trata de Marco Gonzalo Aguirre, amigo de la víctima y sobreviviente de los hechos, quien declaró que los exoficiales, sin indicarles que se detengan... https://t.co/6Sk4quaarU 👈 pic.twitter.com/SVKXH5yHlS
Por su parte, Marco Gonzalo Aguirre, amigo de Lucas (18), y quien manejaba la moto en la que llevaba como acompañante a la víctima la madrugada del 10 de julio de 2020, en pleno aislamiento por la pandemia del coronavirus, fue el primer testigo en declarar en el debate que comenzó este martes por la tarde en una sala repleta del Patio de las Américas de la Universidad de La Matanza.
Desde este martes a la mañana y mientras se desarrollaba la elección de los 12 jurados titulares y los 6 suplentes que tienen que determinar si los policías Ezequiel Benítez y Cintia Duarte son culpables o inocentes, los familiares de Verón se concentraron en la puerta de la universidad con remeras con el rostro de la víctima y banderas que reclamaban justicia para Lucas, y hasta mostraron un flyer con la secuencia del hecho en el que fue cometido el crimen.
"Van a escuchar una historia triste, de gatillo fácil", le dijo el fiscal del juicio Sergio Antín al jurado popular en los lineamientos generales del juicio al que llegaron los policías acusados del delito de "homicidio agravado por ser cometido por un miembro de una fuerza de seguridad y por el uso de arma de fuego y tentativa de homicidio", en el primer caso de Verón (18) y en el segundo de Aguirre, quien era menor de edad al momento del hecho.
Recién pasadas las 18, Aguirre se sentó ante el jurado popular y unas mil personas, entre familiares y alumnos de la universidad que desbordaban la sala, y relató que esa noche concurrió a la casa de Lucas para festejar su cumpleaños.
"A la noche jodimos entre amigos, salimos a tomar aire al patio y vemos que pasa un patrullero y nos miran, no le dimos bola y entramos", recordó Aguirre, quien luego añadió que decidieron ir con la moto junto a Lucas a comprar gaseosas y alguna bebida energizante.
El joven sostuvo que "como no había nada abierto" por el aislamiento por el coronavirus regresaron a la casa de Lucas, pero en ese momento se encontraron "con un patrullero con las sirenas y luces apagadas" que los "quiso chocar".
"No nos dieron una orden de alto, nos asustamos y acelero, era la primera vez que nos pasó algo así. Nos subimos a la vereda y el patrullero nos persiguió tirando cuatro tiros", dijo el testigo.
Según le explicó al jurado, primero hubo dos disparos y luego otros dos cuando cayeron de la moto.
"Lucas corría adelante y yo atrás, él trastabilla y cae, lo paso y vuelvo porque no venía más", dijo el joven, quien contó que fueron al hospital y después lo vio a Lucas "en la camilla ya sin vida".